Préstamo de libros

"¿Algo va mal en el mundo? Pues sí, todos lo sabemos. Las injusticias sociales y los daños al medio ambiente son los dos grandes capítulos en los que podríamos clasificar las disfunciones. Pero los habitantes de este Norte que tanto tiene que ver con el origen de los problemas deberíamos añadir un tercer apartado, no el menos importante: nuestra infelicidad. El estrés, la falta de tiempo para las cosas importantes, unas relaciones sociales mediocres, la inseguridad personal... Sentimos de alguna forma que la humanidad es un desastre, y el hecho de formar parte de él nos impide disfrutar de la vida con plenitud.
Son muchos los que suscriben el consabido argumento de que, si el mundo va como va, es porque no puede ir de ninguna otra forma. Nosotros, en cambio, sostenemos que, de esta forma, seguro que no puede ir. No sólo porque no es sostenible ecológica ni económicamente, sino también (y de hecho sobre todo) porque la especie humana tiene grabado en lo más hondo de sus genes el deseo de bienestar.
Hagamos, pues, algo al respecto. Una buena cosa podría ser buscar las causas de los desarreglos para así poder combatirlos. Cuando nos preguntamos por el origen de las injusticias, casi siempre se las carga el mismo: el sistema. Es decir, los grandes poderes económicos. Ahora bien, existe un vínculo directo entre el poder económico  y cada uno de los ciudadanos: el consumo. Nos guste o no, seamos o no conscientes de ello, todos somos una pieza clave del tan denostado sistema.
Ello puede ser visto como una carga de culpabilidad que no queremos soportar. Pero también puede ser visto como una posición estratégica inmejorable: sin nosotros, el timón no gira. De ahí surge el concepto de consumo responsable, que consiste en conocer el carácter de las empresas que nos ofrecen los distintos artículos para escoger entre ellos de acuerdo con nuestros principios. Podemos conseguir así acumular peso en el lado del timón que más nos guste." [...] (Fragmento sacado del libro "Come y calla...o no. Incidir en el sistema a través del consumo.").

El acceso a la información, como algunos dicen, es un derecho humano, por eso los libros que informan y proponen cambios estructurales en beneficio de todos tienen que ser conocidos y compartidos. Así surgió la idea de prestar libros (muchos de ellos difíciles de conseguir en bibliotecas públicas).

Condiciones para el préstamo de libros:
- 15 días de préstamo
- fianza de 20€ (se devolverá el importe íntegro siempre y cuando se entregue en buenas condiciones)
- 1€ de penalización por día de retraso

Si quieres obtener el listado sobre los materiales que hay en la tienda escribe a la siguiente dirección: eldespertardelalfalfa@gmail.com